Mantener la boca y los dientes limpios y saludables es parte de una buena presentación personal. Más allá de una cuestión estética, la higiene bucodental es importante no sólo para evitar la aparición de caries, que pueden derivar en problemas mayores, sino también otras enfermedades de la boca. Además de esto, ciertas lesiones presentes en la boca y los dientes pueden ser un síntoma de enfermedades y carencias nutricionales no diagnosticadas, tales como deficiencias de vitaminas o minerales.

Si bien el cepillado diario es la base fundamental del cuidado de los dientes, no es la única acción que debemos realizar; incluso muchos de nosotros lo hacemos de manera tan rutinaria que no termina siendo eficaz.

Una buena higiene bucal implica tener dientes limpios, sin restos de alimentos; encías rosadas, que no sangran ni duelen durante la limpieza; y no tener mal aliento de manera constante.

A continuación te damos algunos consejos para tener una boca sana:

1. Cepillate correctamente tres veces al día: De ser posible, debemos cepillarnos los dientes luego de cada comida, pero es imprescindible hacerlo antes de acostarnos y al levantarnos por la mañana. En particular, el cepillado nocturno es el más importante, ya que ayuda a eliminar las bacterias generadas durante todo el día. El cepillado debe ser lento y suave, con movimientos cortos; debemos prestar atención a las encías, los dientes posteriores y las zonas alrededor de coronas y empastes. También debemos cepillar la lengua de atrás hacia adelante, ya que allí se acumulan bacterias que causan mal olor. Sin embargo, hay que evitar el cepillado forzado sobre las encías, ya que podemos causar gingivitis y sensibilidad dental.
2. Visitá al dentista al menos una vez al año: Aunque no sintamos molestias, es necesario que el odontólogo nos haga una revisión completa de manera periódica, ya que no siempre podemos por nuestra cuenta ver las caries incipientes o experimentar molestias. También nos realizará una limpieza para eliminar el sarro acumulado.
3. Reemplazá tu cepillo de dientes cada tres meses: O bien cuando notemos que las cerdas estén dobladas. Esto ayudará a evitar las enfermedades periodontales.
4. Utilizá hilo dental: Este hábito permitirá la eliminación de la placa bacteriana que se acumula entre los dientes y debajo de las encías, favoreciendo la formación de caries y enfermedades periodontales. Es particularmente importante utilizarlo por la noche, ya que al dormir hay menos salivación y esto permite la acción de la placa bacteriana.
5. Cuidá tu alimentación: Nuestra dieta influye en todos los aspectos de nuestra vida, por lo que es importante que sea variada, equilibrada y con gran proporción de frutas y verduras. Para el cuidado de la boca, se recomienda moderar la ingesta de dulces y azúcares; también, agrupar sus momentos de consumo. Esto se debe a que el pH de la saliva se torna más ácido para facilitar la disolución de este tipo de alimentos. Si esta situación se mantiene de manera frecuente, favorecerá el crecimiento de bacterias generadoras de caries.

Más tips de cuidado:

- Utilizá enjuague bucal: Los enjuagues bucales ayudan a mantener la boca sana y el aliento fresco, previniendo infecciones y la acumulación de placa. Tené en cuenta que el enjuague no reemplaza el cepillado.

- Consumí chicles sin azúcar: Cuando no podemos lavarnos los dientes luego de una comida, por ejemplo, si nos encontramos fuera de casa, podemos recurrir a los chicles sin azúcar. Masticar chicles fomenta la secreción de saliva, lo que ayuda a la limpieza de nuestros dientes. Los chicles que utilizan xilitol como agente edulcorante tienen además una cierta acción bactericida.

- No abuses de blanqueadores: Siempre que consideres realizar un blanqueo de dientes, consultá con tu odontólogo de confianza. Aunque no sea realizado por un profesional, éste podrá brindarnos recomendaciones de marcas y uso. La utilización incorrecta, excesiva o continuada de blanqueadores puede dañar el esmalte dental.

- Inculcá buenos hábitos de higiene en los niños y llevalos al dentista: Los niños dependen de sus padres para el cuidado dental, por lo que debemos enseñarles a cepillarse los dientes desde pequeños y predicar con el ejemplo. Su primera visita al odontólogo debe ser cuando comienzan a aparecer los primeros dientes, alrededor de su primer año.

¿Ya sacaste turno al odontólogo?

Fuentes: Muy Saludable, Colgate, Salud Estudiantil